¿Estás buscando un lugar único e idílico para desconectar unos días? En plena Costa Brava de Girona, el Far de Sant Sebastià te sorprenderá por su encanto y sus formidables vistas de toda la zona. Además, será una manera de viajar al pasado, al tiempo en que los faros todavía eran habitados por fareros. El Faro, como comúnmente se le conoce, es uno de los puntos más queridos por los vecinos de este enclave único de Cataluña.
El Far de Sant Sebastià, historia viva de Girona
El Faro, que pertenece a la Calella de Palafrugell, es el vigía de esta pequeña localidad catalana. Lo ha sido desde que se erigió en el siglo XIX y el sigue siendo hoy en día, ya que mantiene su estructura y encanto. Situado a 168 metros en un acantilado sobre el mar, este faro de forma cilíndrica y de 12 metros de altura destaca sobre toda la costa. Desde él tendrás una vista única de lugares tan emblemáticos como la bahía de Llafranc, así como de las calas de Cabo Roig, Calella y Palamós.
El Faro y su entorno idílico
Este sitio, así como todo el conjunto monumental de Sant Sebastià de la Guarda, ofrece una de estas visitas que se quedan grabadas en la memoria. Es un lugar ideal para los amantes de la naturaleza y del senderismo, así como para los que desean descubrir paisajes únicos donde la historia, el respeto al medio ambiente y la cercanía de sus gentes se combinan por igual.
En Palafrugell, además, podrás degustar la mejor gastronomía de la Costa Brava, la cual destaca por sus deliciosos platos con ingredientes procedentes del Mediterráneo. No puedes marchar sin probar las salsas, guisos de pescado, patatas y hierbas capaces de sorprender a los paladares más exigentes. ¿A qué esperas? Visita El Faro de Sant Sebastià y sorpréndete con todos sus encantos!
